Pero no me esperaba que a la semana íbamos a sufrir nuevamente por la presencia de un nuevo huracán en el territorio nacional como lo es IOTA y pasa lo mismo, nuestra colonia se vuelve a inundar y nos toca volver a evacuar, a todo este tiempo ya solamente faltaba una semana para el examen general.
La lluvia no paraba, las alertas no menguaban, y mi familia y yo albergados en una casa sin encontrar que hacer más que ser pacientes para retornar a nuestro hogar.
Ese tipo de situaciones sé que los que la pasaron en carne propia pueden entender cómo me sentía, mentalmente estaba desgastado, me recuerdo muy bien que un sábado le escribí a la Máster Elena y le pregunté que cuánto faltaba para hacer el examen y me dijo que una semana, en ese momento mi objetivo era graduarme ese año, pero de tantas cosas que estaban pasando a nuestro alrededor, esas situaciones en las que uno por más que piense no encuentra que hacer, pero hay que pensar que todo va a depender de nuestra actitud, de cómo afrontemos la situación, si bien hay cosas que nos están afectando en el presente, hay decisiones en ese mismo presente que nos pueden afectar en el futuro, y esta era una, el decidir por mí mismo en que tiempo quería terminar mis estudios, y ese era mi tiempo, yo sabía que lo era aún en medio de la situación.
Por fin estaba terminando la situación, nuestro momento de regresar a nuestra casa ya se daba, así que limpiamos todo, y eso me consumió bastante tiempo, ya que todo se había perdido y las capas de lodo eran grandes por lo que llevaba tiempo dejar todo bien, no quedó mucho tiempo para estudiar recuerdo bien que me escribe la Máster un viernes diciéndome que a la 1:00pm del día sábado se daría el examen general vía zoom estaba emocionado, pero a la vez también nervioso ya que iba a durar tres horas y con lo poco que tuve para estudiar aun así estaba seguro de lo que haría pues lo aprendido no se olvida.
Se llega el sábado y media hora antes, ya se encontraba lista la terna, me recuerdo bien que en esa terna cuatro en total, se fue desarrollando el examen y solo recuerdo cuando al final me preguntaron cómo me sentía, fue ahí cuando lloré, solo yo sabía todo lo que estaba pasando, realmente puedo decir que no fue fácil en el camino. Encontré muchas tormentas muchos huracanes tempestades, pero al final pude lograr mi meta que era graduarme en la Universidad, y sé que, como yo, hay muchos estudiantes, que están comenzando su carrera, que están a mitad de carrera, o que están culminado o que ya se graduaron como yo, y cada uno conoce el sacrificio y el empeño que le ponen a lo que hacen para que algún día pueda llegar ese día de decir que se graduaron y que serán un apoyo a la sociedad y al país.
Algunos son sacrificios mayores, porque son emprendedores como en mi caso, otros padres de familia que aun así no se rinden y en su momento quieren ver frutos de su esfuerzo, y por lo que la motivación siempre tiene que estar constante en nosotros, por más fuerte que sean las pruebas, y siempre, siempre dar gracias a Dios porque a pesar de esas pruebas él siempre da las fuerzas para continuar a pesar los procesos que solemos pasar.